jueves, 12 de marzo de 2015

Un mundo por descubrir (segunda parte)

Un mundo por descubrir (segunda parte)

Muy entristecida 
por tan corta vida,
decidí disfrutar 
de lo que me quedaba de día.

Pero cuando llegó 
el momento de aterrizar,
a la cabeza de un niño fui a parar.
Salió del agua y sin saberlo 
a la arena me tiró.
Y el viento otra vez 
de mi se apoderó.

Mientras flotando estaba,
me acordé de mi antigua casa:

-¿Debería volver...?
¿Pero allí qué voy a hacer?

Decidí no volver, me relajé y disfruté.


Segunda parada: El campo

El viento me arrastró 
hacia una manta muy colorida,
que para ser una manta 
demasiado se movía.
Al poco de acercarme,
vi muchísimas de flores
que empezaban a acariciarme.

Pensé en lo bonito que era aquel lugar.
La brisa suave del viento,
el calor de la luz solar.
Y los pétalos de violetas y margaritas,
que me hacían sentir "relax".

Era una sensación de libertad,
que nunca antes había podido experimentar.
Disfruté de cada segundo 
como no lo había hecho jamás.
Hasta que el viento se hizo más fuerte 
y me subió cada vez más.

Tercera y última parada: La montaña

Llegué a ver una montaña,
llena de árboles y alguna que otra cabra.
Así que me acurruqué entre su calentito pelaje
y disfruté del viaje.

Me acordé de cuando en la casa vivía,
me sentía sola, encerrada y aburrida.
En cambio ahora disfrutando,
de cada segundo que va pasando.

Esa experiencia me enseñó,
que la vida es continuamente así.
Probar y descubrir.

Desde aquel día,
en la montaña viví.
Probando, descubriendo, y sobretodo...
siendo feliz.

Fin

Poesía escrita por Sheila Ozuo-omen